DAMASCO, 17 jul (Xinhua) — La cifra de muertos por la letal violencia en la provincia de Sweida, sur de Siria, ascendió a 516, al estallar hoy jueves enfrentamientos esporádicos entre combatientes drusos y tribus beduinas después de que las tropas del Gobierno provisional sirio se retiraran por completo de la provincia al amanecer. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH) dijo que las facciones drusas advirtieron a los residentes beduinos en el barrio de Maqous que abandonaran el lugar antes del anochecer, aumentando la preocupación por la escalada de los desplazamientos, en especial entre las familias beduinas en la zona rural de Sweida. «Estos acontecimientos implican el riesgo de provocar un conflicto sectario más amplio», indicó el OSDH. «Cualquier ataque sistemático contra un grupo social supone una amenaza peligrosa para la unidad siria», agregó. «Ahora, más que nunca, los sirios deben defender valores de reconciliación y respeto mutuo, no de venganza y exclusión». La cifra actualizada de muertos proporcionada por el OSDH incluye enfrentamientos armados, ejecuciones sumarias y ataques aéreos israelíes. La escalada en Sweida comenzó el domingo, después de que miembros armados de una tribu beduina de la zona rural de Sweida, provincia predominantemente drusa, supuestamente asaltaron y robaron a un joven druso cerca de la ciudad de al-Masmiyah, en la autopista Damasco-Sweida. El brutal ataque desencadenó secuestros de represalia, que se volvieron enfrentamientos a gran escala entre combatientes drusos locales, tropas gubernamentales y milicias beduinas. El lunes y el miércoles, Israel lanzó rondas de ataques contra Damasco y Sweida, alegando que quería evitar que la minoría drusa sufriera daños. Los ataques han enfrentado la condena enérgica de la comunidad internacional. Horas después de los ataques aéreos israelíes del miércoles, entró en vigor un frágil alto al fuego entre el Gobierno provisional de Siria y los líderes espirituales drusos. La agencia de las Naciones Unidas para los refugiados y el Consejo Noruego para los Refugiados han expresado su alarma por el deterioro de la situación humanitaria en Sweida, y advirtieron que el frágil alto al fuego podría ser insuficiente para estabilizar la región. Fin
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